El último cuerpo de Úrsula, Patricia de Souza
De las diferentes lecturas que se pueden hacer a la obra de Patricia de Souza (Ayacucho, 1964 ) está la posibilidad de leerla desde el contexto de los estudios de la discusión de la autobiografía o la escritura autobiográfica, como género en la que se establece el pacto entre escritor y narrador (Lejeune, 1975), también desde un registro autoficcional que es como ella misma define su obra (The Barcelona Review, 2009), o desde, y es lo que más manifiesto se vuelve, la tendencia que muchos de los personajes de De Souza manifiestan a modo de intensificación de la vigilancia del sí mismo, una exacerbada fijación en determinar (se), establecer la exactitud del cuerpo y el recuerdo. Personajes que realizan un ejercicio autobiográfico, centrando el foco de esta autobiografía en el recuerdo y la delimitación de sí, lo que llevaría a una supuesta dilucidación de sus identidades.
Es el caso de Úrsula Reis, narradora-protagonista de una de El último cuerpo de Úrsula, una de las primeras novelas de Patricia de Souza, que este año ha sido reeditada por [Sic] ediciones. Novela que narra la vida amorosa de una mujer que ha sufrido un accidente a la columna, accidente que le ha cambiado su percepción del cuerpo y el deseo: “La enfermedad me había hecho diferente. Ya no era la misma desde que la parálisis atacó mi cuerpo…” (99). Mujer que además está prisionera en la cárcel de Lima por haber dado muerte a uno de sus amantes: Orlando; pero también prisionera de su “último cuerpo”, esperando a que le llegue la hora del juicio que deberá enfrentar por el asesinato.
El último cuerpo de Úrsula, Patricia de Souza, Sic Ediciones.
// Claudia Apablaza es profesora del curso de Introducción a la Narrativa del Laboratorio de Escritura.
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